Colonia Jardines del Pedregal, Ciudad de México
Proyecto y Obra: Weber Arquitectos | Autor y Diseño de Interiores: Anina Schulte-Trux | Colaboradores: Maricarmen Lazo de la Vega, Edgar Cedillo | Año: 2013 | M² Remodelación: 75 m² | Fotografía: Alfonso de Béjar
Este proyecto se efectuó en dos etapas. La primera incluyó la remodelación del estudio ubicado en la azotea, en el año de 2011, para el cual se diseñó todo el ambiente interior: un mueble suspendido de una pared recubierta de un lambrín que se continúa para formar la duela; incluye escritorio y espacio para la televisión. Adicionalmente, una mesa de trabajo mira hacia la sala donde se integró un sofá en L. El tapiz y la alfombra de color gris, combinados con detalles neutros se suman a la iluminación con lámparas Artemide y confieren sobriedad al espacio. Para tener luz natural diurna se abrió una ventana que también integra el verde del jardín.
En la segunda etapa, concluida en 2013, se trabajó el área de sala-comedor. Para lograr amplitud, se niveló el piso de ambos espacios. En la sala se crearon dos sofás forrados con tela de lino, chenille y seda, en colores grises cálidos con detalles en vino y terracota, además de dos sillones individuales que miran a la pared contraria, donde la chimenea y repisa, recubierta de caliza gris, se extiende de un lado al otro. Sobre la chimenea se colocaron obras de arte y la iluminación se resolvió con dos lámparas italianas Foscarini de carácter escultórico, que penden del techo.
Al centro, hay dos mesas, una sólida y otra con cubierta de espejo que refleja el color vino del techo que dota de calidez a la sala. Uno de los sofás se ubica debajo de un enorme ventanal que mide 2.50 por 4.50 metros, desde donde se ve un árbol frondoso. Éste, a su vez, se refleja en un espejo que da amplitud al área y lo integra al estar colocado en el muro opuesto y ser casi del mismo tamaño del ventanal. El marco tiene acabado en hoja de plata con betún de judea. Entre los elementos decorativos, destacan esculturas de madera maciza.
El comedor, de estructura ligera en madera con cubierta de vidrio, se ubica al otro lado del área, entre dos ventanales esquinados. El color que predomina aquí es el vino, que hace un guiño al techo del espacio contiguo.
Adicionalmente, se remodeló el baño de visitas de 2 metros cuadrados. Se le dio continuidad infinita con un espejo de piso a techo, en los muros de ambos lados. El piso es de mosaico en colores vino y crema.